martes, agosto 26, 2014

sábado, agosto 16, 2014

Los pobres se lo montan como sea

El papá de Bear Grylls siempre decía: "La necesidad es el mejor invento que existe". Y es por eso que en los escenarios más extremos y de mayor escasez nacen las mejores ideas, porque no hay como hacer las cosas, por lo tanto con los pocos elementos que se tienen a mano, se buscan soluciones.

Antony Bourdain siempre lo dijo: "Los pobres siempre inventan la mejor comida", posteriormente los ricos, copian las recetas y la comida se convierte en algo fino, por ejemplo el Sushi nació de la escasez, al igual que otros platos.

Hace unos días vi este vídeo de un pobre, con una guitarra rota y con una sola cuerda, y con eso el tipo hacía una canción brillante, con esa creatividad, te das cuenta que no es cuanto se tiene, sino cuanto se aprovecha.

domingo, agosto 03, 2014

El Pacto que nunca se dio, y a veces lo lloro...

Con el paso de los años, me he dado cuenta que tanto tiempo sin tener el control de nada, forjaron en mí una mentalidad posesiva, que no es fácil de llevar. En mi infancia no tuve la opción de tener acceso a esas fiestas divertidas, donde los compañeros disfrutaban de música, bailaban, reían, hacían juegos estúpidos, pero que a su vez serían los momentos que recordarían por años.

Quizás soy un poco extremista, de las 1 millón de fiesta que hicieron, tuve la oportunidad de asistir al menos a 2, en ellas me sentí por un instante parte de la melodía que se sentía en ese ambiente, era grandioso, para la vida de cualquier niño u adolescente era todo, un adiós a la rutina, ahí incluso tuve mi primer beso no formal, jugando botellita. Fue raro y poco sensual sentir los labios de una mujer, pero fue emocionante, aunque en un tiempo cuantificado se tratasen de milésimas de segundo.

Con esta breve introducción quiero compartir con ustedes, anónimos visitantes de una página extraña como lo es evilquake, en donde dejo escapar mi mente, y por un instante soy sincero, conmigo mismo, ya que muchas veces la sociedad no exige, a guardar ciertos protocolos, no es posible compartir todo lo que piensas, sin que te juzguen o te traten de loco, siendo esto último algo que me encanta, porque ejemplifica a la perfección, quien soy yo, aquél tipo que no tenía acceso alguno a esas fiestas, ¿Por qué? no tengo respuesta para ello, quizás una personalidad extremadamente tímida, o quizás yo mismo me puse las limitaciones, porque mi lóbulo frontal era similar al de un balón desinflado. 

Con el paso del tiempo me volví algo obsesivo, tenía que coleccionar cosas, era importante para mí, rellenar ese hueco en mi alma, con objetos físicos, juegos, figuras, libros, coleccionar, coleccionar, coleccionar, aún hoy en día lo hago, pero también soy consciente, que nunca lograré llenar el vacío de no haber podido pertenecer a ese grupo, porque desde afuera, miras que todo allí parece más simple, a veces me ha dado por fisgonear los resultados de aquellos lazos pueriles, y todo se resume en abrazos, no sé si hipócritas, o reales, quizás más de lo segundo que de lo primero, pero ¿A quién le importa?, el mundo a veces no necesita más que una plática superficial, un plato de comida y miles de risas.

De todas formas no puedo dejar de lado quien soy, y lo que me gusta, porque tantos años me proyectaron de una forma, que no puede cambiar, y debo confesar que para mí la mujer perfecta siempre fue aquella chica rara, que quisiera volverse sangre para poderle dar varias vueltas al flujo sanguíneo de mi cuerpo, porque para mí el amor era algo también muy intenso, y siempre fue mi ideal.

El rechazo para mí no era más que un vínculo interminable con una amistad, o novia, porque cargué con esos tratos despectivos durante mucho tiempo, yo siempre quise conocer gente que viviera y muriera conmigo, chicas que no coquetearan con otros hombres, que se sintieran tan felices conmigo que no tuvieran la necesidad de sonreírle a un estúpido camarero.

Para mi el ideal de una relación era una mujer con la que yo me sintiera seguro sino estaba a mi vista, que fuese libre, pero que al mismo tiempo me diera a mi libertad, una mujer que no sobrevalorara sus acciones como comer con pobres, porque simplemente nadie es más que nadie, somos sólo humanos y comer con gente de más alta o baja clase no te convierte en la madre teresa.

Mi ideal de mujer no se obsesionaba con las modas, o libros estúpidos como las "50 sombras de Grey" libros basurita que son perfectos para llenar de excremento, y si nos ponemos más actuales, siempre deteste las chicas que en su muro de facebook ponían frases entre cortadas de autores basura de autoayuda, cuando veía una de estas frases lo único que pensaba era: "como se debe estar riendo el autor que ahora mismo esta en un yate". porque toda esa boñiga, dista siglos o años luz de ser algo real, es basurita que se escribe para vender, es como comparar un plato refinado de un chef con una queso burguesa (Y ni siquiera me refiero a esas hermosas hamburguesas de plástico a las que les toman fotos para que se vean bonitas en la publicidad).

Mi idea de mujer tenía que estar loca, y que quisiera a su familia, pero que no estuviese casada con ella, porque hay gente que tiene una tremenda obsesión con sus padres. Y me parece enfermizo que a cada instante alguien reciba mensajes de ellos.

Hay dos cosas que me marcaron mucho en la vida, y es probable que ya antes haya hablado sobre ello, en esta página, la bebida y el cigarro, ambas cosas me parece tremendamente nocivas, en mi infancia, mi madre fumaba como una chimenea, de hecho ella no sabía que estaba embarazada de mí, y el primer mes de embarazo seguía fumando, resultado: yo y mi puto asma, y créanme sentir que respiras por una pequeña hendija bajo el agua, no es agradable, es de las cosas más frustrantes que podes vivir, es como sentir una impotencia tremenda, porque la vida te fuerza a ser un maldito fakir. 

La bebida también marcó mi vida, recuerdo una escena muy trágica, cuando era niño mi papá estaba totalmente borracho, el irresponsable iba manejando, y a su lado estaba mi madre que amenazaba con tirarse del auto, porque mi padre estaba totalmente descontrolado, se reía como un demente y aceleraba cada vez más y más. Y esa es tan sólo una de las tantas anécdotas que involucran el alcohol, recuerdo una vez que mi padre compró una serie de cajas de cerveza, las tenía todas colocadas en un cuarto que tenía el piso de cemento (El resto de mi casa era de madera), mi mamá bajó enojada, y tomó cada una de las botellas, y empezó a destruirlas en el piso, sonaba "CRASH, CRASH, CRASH", y todavía hoy en día puedo recordar el sonido de esas malditas botellas.

Por eso en mi vida, el único vicio que tengo es el de ser un obsesivo. Pero le hago la cruz a esas malditas drogas y a la gente que no vive y muere conmigo. Me despido diciendo, que tengan una feliz mañana, tarde o noche, la vida nos pone ante diversas situaciones, algunas las sorteamos, otras las escogemos, y otras viven en nuestro corazón, para ser repetidas mil veces.