lunes, octubre 25, 2010

Soñe que soñando vivía...

Ha pasado una semana y me siento mucho mejor que ayer, siempre he pensado en el amor como una fruta que se va despellejando hasta que adentro queda un interior similar a una semilla dura y seca, que aunque es imposible de consumir, de seguro que tiene derecho a dar más vida, que la cáscara misma...

Entre mis pensamientos, recordé el año 2000 y 2001 cuando me decía a tomar una de las decisiones más importantes de la vida: ¿Qué cosa estudiar y en qué desarrollarme? la respuesta fue complicada de encontrar y no porque no supiera que hacer, todo lo contrario quería estudiar tantas cosas que sabía que el tiempo no me iba a alcanzar... desde veterinario, hasta piloto de avión, informática, artes, quería ser de todo, pero al final decidí estudiar publicidad...

Y me encanta la publicidad, de hecho no me arrepiento de haber estudiado eso, siempre he pensado que todo conocimiento adquirido es suficiente para sentirse aunque sea una milésima más sabio. Y por eso jamás estaré en contra de aprender... porque aprender te ayuda a volar, y volar te ayuda a no pensar tanto en como se te cae la vida en otros aspectos... y así se sucedieron las cosas y así soy lo que soy...

No obstante luego también quise estudiar diseño, y así sucedió fue algo que no tenía presupuestado pero que la misma vida me fue llevando por esos pasajes misteriosos que realmente no podríamos entender... Y también estoy agradecido de tener ese conocimiento y poder desempeñarme en ese fascinante mundo de los colores y las composiciones... quizás no muy valorado por la gente, pero no me importa, me hace feliz y creo que ser feliz es la meta más importante de todo humano...

Es decir ¿Qué nos mueve por el mundo? que es eso que impide que gaste los ahorros de mi vida en un revolver para volarme la tapa de los sesos... la respuesta es simple: quiero ser feliz... y lucho por ello. Todas las mañanas que hago un pequeño esfuerzo por conseguir algo tiene un único objetivo, trato de sonreír, pero no como esos libros de autoayuda que se enfocan en ejercicios para hacer algo natural de la manera más fingida del mundo... hablo de realmente sentir una energía que te recorre el tiempo, y que los rayos de luz que avecinan la mañana, le dan un nuevo significado a la vida... es ahí donde todo queda claro, yo vine a este mundo a tratar de ser feliz...

Y a veces me encuentro en mi cuarto pensando en todo lo que se viene, y la misma vida me ha enseñado una lección, que nunca encontré en los libros que leía, uno no escoge lo que sucede, simplemente hay algún camino planeado para nuestro caminar, es cierto que tenemos opción de escoger una surtida cantidad de sabores en este bufete que es la vida... pero al final las cosas, gente, ideas, acciones, están ahí y son o no tuyas... y no se puede hacer demasiado si sencillamente no te pertenecen...

martes, octubre 19, 2010

El dolor de mi alma

Absolutamente nadie entiende de dolor... es una vivencia tan personal, que es imposible explicarla, a pesar de que la gente cree verla en tu rostro, cuando me hago el fuerte, salgo con la mejor cara que tengo, ahí es donde le sonrío a todo el mundo, pero nadie sabe mi agonía interna, es como si una bolsa gigante se formara entre mis ojos, y cuando por fin es noche, dejo salir todas esas penas...

Hoy andaba en una entrevista que sólo me hizo verme a mí mismo como un ser cómico y patético, estudié, realmente siento que me partí el lomo en las aulas, las desveladas no fueron suficiente, estaba viviendo una mentira, es difícil poder recuperar esas ganas de todo, es muy complejo, uno trata de encontrar esa respuesta que detenga el sufrimiento, pero no es algo sencillo, por eso al final prefiero envolverme en esta ola, antes de que me embista... porque si lo hace sabre que se habrá acabado todo, y seré parte de la historia, como Ernest Hemingway o Jack London...

Estoy cansado de correr y no obtener nada, estoy hasta la coronilla de llorar como nunca, y morirme cada noche... y las cosas que antes me motivaban ahora provocan indiferencia, antes me gustaba la música, ahora la misma me despedaza, antes leía los libros que tengo, ahora mi cabeza está en cualquier parte menos en la lectura... al final me he convertido en un animal de costumbres negativas, con una decadencia que me acerca a lo que nunca quise ser.

He tratado de ser fuerte sin consumir drogas, pero entiendo a la gente que lo hace, es bueno tener de vez en cuando un motivo para reír, aunque este no sea sincero, sin embargo en el estado degenerativo en que me encuentro es probable que me termine de hundir por completo. Yo sólo soy paciente y como todo aquél convaleciente espero una mejora inmediata... realmente la preciso, porque el dolor en mis pasos me estaca el corazón...